Aladino y la lámpara maravillosa
Vengan a mi que este cuento les quiero yo contar a escuchar,
Vengan a mí a mi mundo de sueños a soñar,
Vamos ya no traigan paraguas una capa roja ni una gran cartera,
Para llegar a mí basta solo fantasía y bondad…
Padre _Aladino, Aladino basta ya ven a casa.
Aladino _Estoy jugando con mis amigos, déjame en paz papa.
Padre _Aladino, ven enseguida que te necesito.
El muchacho es realmente rebelde, las cosas no cambian y ni siquiera ahora que el padre a muerto. Aladino esta como de costumbre perdiendo el tiempo, se acerca un forastero que viene de muy lejos, de África. Este forastero es en realidad un mago muy poderoso.
Mago _ ¿Eres tu Aladino el hijo del sastre?
Aladino _Si, soy yo honorable señor, pero mi padre a muerto.
Mago _Ho, pobre hermano mío y yo que he venido desde el África negra solamente para verlo. Avisa a tu madre que mañana iré a visitarla y por ahora llévale estas monedas de oro.
El extraño forastero da las monedas a Aladino y al día siguiente delante de la viuda.
Mago _He esperado 30 años para volver a abrazar a mi hermano, pobrecito. Por eso ahora me ocupare yo de la educación de Aladino cuñada mía.
Madre _Gracias buen señor, pero tú no te pareces mucho a mi difunto marido, ¿porque será.
Mago _Mm, mm... será porque estuvimos siempre tan alejados. Aladino ven conmigo comenzare a educarte.
Aladino _Verdaderamente yo preferiría ir a jugar.
Mago _ ¡Ven conmigo!, he em… con tu tío y veras como te vas a divertir.
Madre _Anda Aladino tu tío te convertirá en un gran señor, anda.
Hablando continuamente el forastero obliga a Aladino a hacer una larguísima caminata, llegan por fin al límite del bosque, justo al pie de una gran montaña.
Mago _Detengámonos aquí, yo me sentare a descansar mientras tú vas a recoger un buen atado de leña, para encender el fuego, te mostrare cosas maravillosas.
Aladino _Cosas de que tipos ¿juegos?
Mago _Mm Hem, otras cosas Aladino, veras otras cosas.
Aladino _No comprendo ¿de qué cosas se tratan?
Mago _ ¡Basta con tantas preguntas!, ve enseguida a recoger la leña, yo no soy tu tío soy un poderoso mago africano y si no haces lo que te digo te transformare en un pedazo de leña, ¡has comprendido!
Aladino se asusta tanto que corre a recoger toda la leña que puede, y es así que de pronto delante del mago arde un hermoso fuego.
El mago ahora se levanta, se acerca al fuego y pronuncia en voz alta extrañas palabras.
Mago _Piel de serpiente mago soy yo y mi gordo conejo incienso ponemos mientras te clamo la formula mágica que dice así
Tim bala ve alamalatu fuego ardiente desaparece tu Tim bala ve alamala tu bloque pesado aparece tu.
Aladino _El fuego se ha transformado en un gran peñasco, ¿como lo has hecho mago?
Mago _Secretos del oficio hijito, esta roca oculta la entrada de una cueva subterránea llena de piedras preciosas, desciende y podrán ser tuyas, en cambio yo quiero una vieja lámpara que encontraras en el fondo, toma este anillo, te ayudara cuando te encuentres en peligro, quita la roca y desciende.
Aladino _Esta bien, pero tengo miedo.
Mago _No debes tener miedo, eres el único que puede penetrar en la gruta del tesoro, lo he leído en los libros de magia.
Aladino _Entonces desciendo.
Mago _ ¿Como vas por ahí?
Aladino _Bien, pero que frío.
Una extraña luz viene del fondo, de lo más profundo de la cueva, Aladino continua bajando y lo primero que encuentra es la lámpara que le pidió el mago.
Aladino _Aquí esta la lámpara, porque querrá tanto el mago poseer esta lámpara, lo que no veo son las piedras preciosas aquí no hay ninguna. Que lindas piedritas coloradas cuelgan de los árboles, arrancare algunas.
Aladino no sabe que se encuentra en medio de el famoso jardín encantado, un jardín donde sobre los árboles no crecen manzanas o naranjas, sino rubíes zafiros, brillantes. Aladino ve las piedras preciosas, pero como están colgando de los árboles no puede reconocerlas, sin embargo se llena los bolsillos.
Aladino _El mago me ha engañado, aquí tesoro no hay ninguno, saldré a decírselo.
Mago _ ¿Aladino, Aladino querido donde estas?
Aladino _Estoy regresando mago, que cansancio esta escalera es larguísima.
Aladino _Ayúdame a salir fuera de este agujero.
Mago _Dame primero la lámpara hijito.
Aladino _Te la daré cuando aya salido.
Mago _Dame primero la lámpara, después yo te ayudare a salir.
Aladino _No primero ayúdame.
Mago _No, primero dame la lámpara.
Aladino _No
Mago _Si
Aladino _No
Mago _ ¡Dame la lámpara te digo!
Aladino _Ayúdame.
Mago _Entonces te quedaras para siempre en el fondo de esta cueva.
Aladino _No mago te ruego no me dejes aquí preso, ¡auxilio!
El mago coloca la roca sobre la entrada de la cueva, y Aladino viéndose prisionero comienza a llorar frotándose los ojos, imprevistamente aparece frente a el un esclavo grande como una torre.
Esclavo _Que mandas mi señor.
Aladino _ ¡¿Pero tú quien eres?!
Esclavo _Soy el esclavo del anillo, restregándote los ojos has frotado el anillo, y esa es la señal que yo siempre espero para presentarme a recibir las órdenes de quien tenga el anillo puesto en el dedo. Manda mi señor.
Aladino _Quiero… quiero regresar a casa.
Esclavo _Serás satisfecho mi señor.
Aladino, como un relámpago se encuentra de nuevo en su casa, cuenta todo a su madre y le muestra las extrañas piedras que arrancara del árbol, en el jardín encantado.
Aladino _Es así como el mago me engaño, en lugar del tesoro he encontrado estas piedritas y una vieja lámpara, aquí esta.
Madre _Dámelas la lustra bien he iré a venderla, así podremos comer por lo menos hoy.
La madre comienza a frotar con fuerza la lámpara, pero apenas la a tocado…
Genio _Soy el genio de la lámpara, nada me es imposible, ordena.
Aladino _Otro esclavo, ¡grande como una torre!, madre mía nuestras penas se han terminado. _Genio ¿puedes traernos de comer?
Genio _Para tan poca cosa podrías haber llamado a mi ayudante, el esclavo del anillo. De cualquier manera aquí tienes, una mesa de plata, 12 platos de oro, exquisitas bebidas, un buen blindado y un asado de buey.
Aladino _Bien genio, puedes irte ahora.
Durante muchos años la pequeña familia de Aladino vive en la riqueza, finalmente un día.
Mensajero _ ¡Sierren puertas y ventanas!, pasa la hija del Sultan, se le cortara la cabeza a quien se atreva a mirar a budur la hija del Sultan.
Aladino _Dicen que la princesa es bellísima, voy a verla. Ho que maravillosa joven.
Princesa_ Soy budur princesa de la china,
Dentro de poco yo seré la reina,
Busco a un bello joven por esposo
Y en mi corazón abra reposo,
Mis doncellas no son bellas como yo
Encontrar un marido apasionado antes que yo…
Aladino _Madre, he visto pasar a la princesa y me he enamorado, voy a casarme con ella. Iras a ver al sultán y le ofrecerás en una vasija las piedras que he traído del jardín encantado, cúbrelas con un paño de lino y ve.
La madre de Aladino trata de disuadirlo pero en fin tiene que hacer lo que el hijo le pide. Después de una larga espera es recibida por el Sultan.
Sultan _Dime que es lo que desea buena señora, tratare de complacerte.
Madre _Mi noble Sultan, mi hijo Aladino quiere por esposa a tu hija, y te manda este regalo, ten señor la bondad de levantar el lino.
Sultan _Aahh de que se trata, langosta frita, nido de golondrina, veamos… ho! brillantes, rubíes, zafiros, es un tesoro enorme. Que mi hija se case con el rico Aladino.
El día del casamiento hubo una gran fiesta en toda la china, Aladino antes de la ceremonia frota la lámpara.
Genio _ ¿Que es lo que deseas esta vez, quieres que te traiga todas las riquezas sepultadas en el mar rojo?
Aladino _Quiero que construyas un palacio bellísimo, justo frente a la residencia del Sultan.
Genio _Un palacio entero, bien mi señor estará hecho en un relámpago.
A la mañana siguiente al levantarse, el Sultan ve el hermoso palacio mandado a construir por Aladino. Se pone muy contento pensando en el provechoso matrimonio de su hija. La fiesta es esplendida. La bella budur y Aladino viven muy felices en el palacio de oro. Pero esta felicidad va a durar poco tiempo.
Un día en que Aladino no estaba en el palacio porque se había ido a la guerra, la princesa budur ve llegar a un extraño mercader quien en realidad es el mago africano disfrazado, quien por engaños se hace entregar la lámpara mágica. Budur se la da, porque no conoce el valor de la lámpara maravillosa. Apenas el mago malo la tiene en sus manos la frota. Y aparece el genio.
El genio queda un momento sorprendido viendo la lámpara en manos del mago, pero aunque de mala gana debe obedecer al nuevo patrón. El mago no pierde tiempo y ordena al genio de la lámpara que transporte el palacio de Aladino con todos sus jardines y moblajes al África, también a la princesa budur y a toda su corte.
Cuando Aladino regresa de la guerra no encuentra ni su palacio ni a su esposa, muy triste llama al esclavo del anillo.
Aladino _Tráeme a mi esposa y a todo el palacio.
Esclavo _No tengo poderes sobre los encantamientos de la lámpara, lo máximo que puedo hacer es conducirte hasta tu palacio en África.
Pronto Aladino se encuentra bajo la ventana de su palacio y llama a la princesa
Princesa _ ¡Aladino, mi esposo!
Aladino _He venido a liberarte, toma pon este poderoso somnífero en el vino del mago.
Esa noche cuando el mago bebe el vino se duerme al instante. Aladino se apodera de la lámpara y cuando aparece el genio le ordena.
Aladino _Transporta al mago a la isla más desierta que encuentres, en cuanto a nosotros llévanos de nuevo a china.
Cuando el Sultan y la madre de Aladino vieron a sus hijos los abrazaron con gran alegría. Por un mes se festeja en china, el retorno de los príncipes.
Llego hasta aquí, este cuentito breve ya se va, ya se va…
El disco hace click y verán despacito frenara se detendrá
Pero esperen que otro llegara, había una vez el musícuento dirá, y otra historia comenzara…